Una última excursión antes de comenzar proyecto: la increíble zona arqueológica (aunque demasiado turística) de Tehotihuacan, que significa lugar de dioses.
Esta zona arqueológica es toda una ciudad prehispánica, que aún se conserva porque Hernán Cortes y los colonizadores españoles no la encontraron ya que estaba bajo tierra y gracias a eso, una vez excavada la zona, se pudieron recuperar las pirámides, sino seguro que los españoles hubieran plantado una iglesia encima ¡qué hábito tan odioso!
Maqueta de Teotihuacan en la actualidad |
Panóramica |
En esta ciudad encontramos una calzada principal, lo que para nosotros sería ¿la Gran Vía?, llamada Calzada de los Muertos y al fondo la pirámide de la Luna. En esta pirámide es donde llevaban a cabo los sacrificios y los cuerpos eran dejados caer desde lo alto de la pirámide rodando hasta la Calzada de los Muertos, de ahí su nombre.
Al fondo la pirámide Luna y la Calzada de los Muertos |
La otra pirámide principal de esta zona, es la pirámide de Sol, la pirámide más grande y el lugar de culto principal pues ocupa el lugar central dentro de la ciudad. Esta montaña sagrada tiene una cueva en su interior, que en la cultura prehispánica es entendida como matriz que da vida pero también como entrada al mundo de los muertos. Podría contar mil detalles más sobre los ritos antiguos, pero mejor que algún día visitéis el lugar y lo descubráis por vosotros y vosotras mismas porque es toda una complejidad entender la cosmovisión prehispánica.
Pirámide Sol, fijaos en lo hormiguitas que parecen las personas y os daréis cuenta de las dimensiones de la pirámide |
Las vistas desde el restaurante, tormenta y rayos incluídos |
Dedicado especialmente a Ana Vega, que sé que te encantan las ruinas y sus historias
No hay comentarios:
Publicar un comentario