Último fin de semana de julio
Aún no estoy como para salir de fiesta pero después de una semana en la que prácticamente sólo leo y descanso me hacía falta algo más.
Así, el viernes noche, Issa, la chica de la ong con la que vivo temporalmente y su novio Krako, nos invitaron a tomar algo (bueno en mi caso agua) a casa de sus amigos y después fuimos a El Pulque, donde había varios conciertos, entre ellos el de su novio.
Música surf, popularizada en las películas de El Santo |
Música indie, grupo de Krako |
El sábado también salí a dar una vuelta y conocer la famosa Container City, la zona de fiesta de Cholula, aunque yo fui más bien por la tarde a tomar un simple té. Container City como su propio nombre indica es toda una zona de containers, sí, de esos que llevan en los barcos para transportar cosas, reconvertidos en bares. Es como una caja abierta y cada una de ellas es un bar, restaurante o incluso tienda de ropa. Ciertamente original y con un aire muy bohemio.
El domingo, había una feria en el Barrio San Andrés de Cholula, dónde está la casa de Issa y se oían las barracas, los cohetes y el gentío, así que decidí acercarme y aparte de un montón de puestos de comida que no podía probar, vi una larga cola de gente. Quería ver para qué era la cola y ya lo supuse cuándo vi que se adentraba en la Iglesia: Feria de la Adoración de Cristo, como las fiestas de cualquier pueblo alrededor de Bilbo sólo que nosotros los santos los dejamos para el día; aquí en la noche hacían cola para besar al Cristo:
¿Y por qué les ponen pelucas a los santos? |
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