Aquí desayunamos |
La esposa de Tomy, compañero de Enlace, ya dio a luz hace unas semanas y él se ha reincorporado al trabajo, así que me voy con él a la comunidad Jerusalén, una de las comunidades más alejadas, como a unas dos horas y media de Comitán. Salimos a las 7h y como para llegar tenemos que atravesar la carretera de Lagos de Montebello, nos paramos en un puesto junto a los lagos a desayunar: frijoles, carne asada y chorizo con café, desayuno mexicano.
la comunidad de Jerusalén |
Jerusalén es una comunidad de origen tzeltal situada cerca de las cascadas Las Nubes y Tomy, como también es tzeltal imparte el taller en su idioma con un grupo de mujeres; así que yo intento descifrar lo que dicen y sigo lo que escribe en los papelógrafos que sí está en castellano. El taller en este caso era sobre el invernadero de hortalizas, una capacitación sobre la siembre de verduras y los problemas a los que hacen frente respecto al riego, plagas, etc.
Las mujeres en el invernadero |
Les maravillan las fotos |
Después, a duras penas realizo una entrevista en lugar de las 4 que suelo hacer en otras comunidades, porque no hablan mucho castellano y yo no entiendo ni una palabra de tzeltal, ¡es imposible entender algo del idioma! pero los tonos y caras ayudan. Así, me dí cuenta de que discutían sobre que las mujeres fuesen a un evento en otra comunidad ;muchas de éstas alegaban que sus maridos no las dejarían ir y que si llegaban tarde las dejarían durmiendo en la calle cómo ha pasado anteriormente…Implicar a los maridos y hacerles entender el trabajo en grupo o con una organización es una ardua tarea, por eso todas las organizaciones empiezan por los niños, haciendo algún proyecto con niños y con ellos implican a las mujeres;el gran salto es que los hombres también participen.
Con lo cerca que estamos de las cascadas, Tomy decide llevarme a Las Nubes, a visitarlas aunque sea 10minutos a pesar de que una vez más la temporada de lluvias hace que tengan un color amarronado (café como dicen acá) en lugar de verdes y azules. Aún así son preciosas.
La vuelta a Comitán se convierte en un largo trayecto por culpa de la lluvia y de los militares, que a pesar de no tener derecho como la policía migratoria a pedirte identificación lo hacen y como ambos cuestionamos el tener que entregársela, nos bajan de la camioneta y la revisan de arriba abajo junto con nuestras pertenencias mientras me muerdo la lengua tanto o más que Tomy para no reclamarles y gritarles a ver en base a qué llevan a cabo el registro….claro que me aguanté, los militares en México no es alguien que quieras como enemigo y el resto del camino...pues ya, fuimos escuchando norteños, banda, corrido yduranguenses para olvidarnos del cabreo y después nos fuimos a cenar ricos huaraches en compensación. Un día agotador, pero sin duda muy completo.
Gracias Tomy! |
No hay comentarios:
Publicar un comentario