miércoles, 21 de septiembre de 2011

Jerusalén: invernadero de hortalizas

14 de septiembre

Aquí desayunamos

La esposa de Tomy, compañero de Enlace, ya dio a luz hace unas semanas y él se ha reincorporado al trabajo, así que me voy con él a la comunidad Jerusalén, una de las comunidades más alejadas, como a unas dos horas y media de Comitán. Salimos a las 7h y como para llegar tenemos que atravesar la carretera de Lagos de Montebello, nos paramos en un puesto junto a los lagos a desayunar: frijoles, carne asada y chorizo con café, desayuno mexicano.


la comunidad de Jerusalén
Jerusalén es una comunidad de origen tzeltal situada cerca de las cascadas Las Nubes y Tomy, como también es tzeltal imparte el taller en su idioma con un grupo de mujeres; así que yo intento descifrar lo que dicen y sigo lo que escribe en los papelógrafos que sí está en castellano. El taller en este caso era sobre el invernadero de hortalizas, una capacitación sobre la siembre de verduras y los problemas a los que hacen frente respecto al riego, plagas, etc. 

Las mujeres en el invernadero

Les maravillan las fotos


Después, a duras penas realizo una entrevista en lugar de las 4 que suelo hacer en otras comunidades, porque no hablan mucho castellano y yo no entiendo ni una palabra de tzeltal, ¡es  imposible entender algo del idioma! pero los tonos y caras ayudan. Así, me dí cuenta de que discutían sobre que las mujeres fuesen a un evento en otra comunidad ;muchas de éstas alegaban que sus maridos no las dejarían ir y que si llegaban tarde las dejarían durmiendo en la calle cómo ha pasado anteriormente…Implicar a los maridos y hacerles entender el trabajo en grupo o con una organización es una ardua tarea, por eso todas las organizaciones empiezan por los niños, haciendo algún proyecto con niños y con ellos implican a las mujeres;el gran salto es que los hombres también participen.




Con lo cerca que estamos de las cascadas, Tomy decide llevarme a Las Nubes, a visitarlas aunque sea 10minutos a pesar de que una vez más la temporada de lluvias hace que tengan un color amarronado (café como dicen acá) en lugar de verdes y azules. Aún así son preciosas.



La vuelta a Comitán se convierte en un largo trayecto por culpa de la lluvia y de los militares, que a pesar de no tener derecho como la policía migratoria a pedirte identificación lo hacen y como ambos cuestionamos el tener que entregársela, nos bajan de la camioneta y la revisan de arriba abajo junto con nuestras pertenencias mientras me muerdo la lengua tanto o más que Tomy para no reclamarles y gritarles a ver en base a qué llevan a cabo el registro….claro que me aguanté, los militares en México no es alguien que quieras como enemigo y el resto del camino...pues ya, fuimos escuchando norteños, banda, corrido yduranguenses  para olvidarnos del cabreo y después nos fuimos a cenar ricos huaraches en compensación. Un día agotador, pero sin duda muy completo.

Gracias Tomy!

Chiflón en grupo


Domingo 18 de septiembre

Ya había estado en el Chiflón, pero Ana Elena, compañera de Enlace de la que ya he hablado y sus padres del centro agroecológico Tsomanotik querían llevar a dos nuevos voluntarios franceses y a Cory, la nueva voluntaria alemana y al cónsul del Salvador en Comitán que llegó hace poco. Otro curioso grupo que no me podía perder.

El cónsul, Ana Elena y su madre, (yo), Cory, los dos franceses y una chica de comunidad


Y otra vez que me moje pero con gusto al ir al mirador a observar la majestuosidad de la cascada Velo de Novia.

Para terminar el día, Ana Elena me invitó a su casa a cenar junto con Cory y otros dos amigos alemanes que llegaban esa noche desde un albergue de migrantes en Tapachula, otra noche de historias.

Temazcal


9 de septiembre

¿Qué mejor plan después de una semana de trabajo y aún constipada (desde Sancris) que ir a relajarse a una sauna? Bueno no exactamente.

Este de la izq es un temazcal de la época maya en la selva

Un Temazcal es un baño de vapor espiritual heredado de los mayas, que construían bóvedas de piedra en sus ciudades prehispánicas, junto a las pirámides simbolizando la entrada al centro de la pacha mamá o madre tierra y el vapor es el calor que ésta emana. Todavía hoy los Lacandones construyen algunos temazcales en medio de la selva, aunque de paja y con un pasillo en el que hay que ir a gatas para llegar a la zona del baño simulando el regreso al vientre de la madre.


 

Este Temazcal en Comitán es también una bóveda de piedra bajita, con inscripciones en el techo y un agujero en el centro en el que se colocan las piedras calentadas en un horno junto con plantas medicinales y se va echando agua para que liberen vapor. Eso sí, es un temazcal moderno, que intenta unir las tradiciones de baños árabes e hindúes con las de los indios maya.

Antes del Temazcal con Ana Elena y sus padres

Lo primero que hay que saber, es que no se entra en bikini o desnudos sino con ropa, te sientas en un banco sobre la piedra y te explican cómo respirar para no marearte, cómo cubrirte la cabeza con una tela para evitar inhalar ceniza al comienzo, cómo hacer los estiramientos y te dan una rama para los masajes. Después comienzan los decretos o mensajes tipo mantra, el maestro de ceremonias los dice en alto y todos repetimos a coro, convencidos de que las palabras y el pensamiento dominan el cuerpo. Así que te concentras en respirar profundo para que las plantas y el vapor limpien tu cuerpo y repites; algunos ejemplos que recuerdo:
 “Estoy sana, estoy fuerte”
“Que todos los seres sean de paz, que todos los seres sean de amor”

Y después sólo respiras en la oscuridad, realizando los estiramientos, oyendo como todos respiran al unísono y sudando un chingo! Para terminar el ritual, dejan entrar un poco de luz y aire por una rendija y reparten el té, para hidratar pero no enfriar y a la salida: ducha de agua fría.

San Nicolás: taller de nutrición y Aldeas Infantiles


8 de septiembre

Estancia de Aldeas Infantiles
Como expliqué en un post anterior, Enlace suele entrar en comunidad de la mano de otras dos organizaciones, Ceiba, de la que ya he hablado y Aldeas Infantiles, a la que le toca el turno. De hecho, Aldeas suele ser la primera organización en empezar a trabajar con las comunidades, dado que su trabajo se centra en los niños, no implica tanto a los adultos y para nada a los hombres. Su trabajo consiste en agrupar a las mujeres para organizar una estancia para los niños, para que coman en
 el receso de la escuela y para que estén allí aprendiendo y jugando cuando no hay clases o cuando las madres trabajan y esta es la vía más fácil de trabajo en una comunidad, en el sentido de que las mujeres siempre están más dispuestas a organizarse, sobre todo tratándose de sus hijos, y una vez que el grupo de mujeres ya está acostumbrado a trabajar juntas, es cuando comienzan los proyectos con Enlace y los talleres educativos con Ceiba implicando poco a poco al resto de la familia.


Así a San Nicolás vamos a dar un taller de nutrición y después elaborar el menú de la estancia de los niños, para que su dieta sea más sana mientras el personal de Aldeas pesa y mide a los niños para controlar su salud. 

El menu
Compañera de Aldeas pesando a los niños





















Por cierto, se llama Buena Vista porque está junto a los Lagos de Montebello, un poco lejos ya de Comitán y por supuesto, nos paramos en el camino junto a los lagos a desayunar: quesadillas de flor de calabaza, de longaniza y chinkulguajes (tortillas rellenas de frijol y cilantro).


Esta es la comunidad de San Nicolás Buena Vista
Aquí desayunamos

Taller de plantas medicinales


5 de septiembre

El desayuno
El Ceiba, organización de la que ya he hablado, organiza un taller de plantas medicinales impartido por una farmacéutica de Alemania, país impulsor de una medicina dual, ya que en sus farmacias vende plantas y tinturas además de la medicina de patente. México, sobre todo Chiapas, es uno de los lugares más ricos en plantas medicinales, sin embargo, ya son pocas y muy mayores las personas de las comunidades con conocimientos sobre el uso de las plantas, mientras que las farmacias y sus medicamentos de patente, son todo un negocio anunciado por televisión una y otra vez. 



Por eso, el taller reúne a gente que maneja el uso de plantas de varias comunidades (a destacar Nichim Dios, comunidad en la que muchas de las ancianas son parteras y curanderas) para que compartan sus conocimientos los unos con los otros y mantengan vivo su conocimiento al respecto transmitiéndolo a las generaciones más jóvenes. 

Las herederas de los conocimientos, las más jóvenes de Nichim Dios
  
Ah! ya tengo remedio para la migraña! Ahora falta conseguir las plantas y ponerse a hacer la tintura en Bilbo...